De balneario
2009 / 07 / 03 - La Nueva España
Marché hace un par de fines de semana de relax al balneario de Mestas para poder enfrentarme con ánimo a les fiestes de San Xuan y lo último que recomiendo a nadie es intentar relajarse con un montón de amigos. Aparte de ser la perdición del colesterol y los triglicéridos, son la ruina del espíritu de relajación. La prueba está que, haciendo repaso, no tengo recuerdo siquiera de haber dormido en el hotel y mucho menos de haber utilizado las aguas termales. Pero podría da toda una lección magistral de las maravillas del queso de la zona, de lo bien que preparan qué se yo que cantidad de platos y de la impresionante riqueza de los cantos folklóricos que residen en la memoria colectiva de todos los presentes a partir de esa hora del día en que ya es el día siguiente.
Esto último me vino muy bien. La Nueva España me encarga un recopilatorio de todas estas canciones que son patrimonio de todos los asturianos y que todos sabemos más o menos cantar. Hacerlo bien es otra cosa. Pero se pone empeño en ello. Como estamos en el oriente uno entiende que las canciones cambian. Como cambian los quesos o el paisaje. Nada menos cierto. Canciones como “Villaviciosa hermosa” forman parte del hit-parade colectivo. Existe partitura de ella en los cancioneros del siglo XIX. Y continúa siendo inseparable del sentimiento chigreru de pertenencia a un lugar. Como tantas otras que podrías considerar que, por su temática, sólo son propiedad de la memoria de la gente del lugar del que habla. Como ocurre con “Dicen que van a poner un ferrocarril a Mieres”.
Así, pues, con la salud derrotada y el ánimo abatido, afronté el calendario de fiestes de San Xuan. Que, no sé si gracias a Dios o al concejal de turno, ya terminó. Tengo el cuerpo con más ganas de balneario que nunca. Pero pienso: ¿y si acabo igual? Me niego. Este fin de semana me quedé encerrado en casa. Sin quesos, sin platos exóticos y sin posibilidad ninguna de dedicarme a los cantos folklóricos. Para no salir siquiera, leo el periódico en la versión digital. Más entretenido. Muchas noticias vienen con comentarios adicionales. Imagínate. Con las cosas raras que pasan en Mieres y sólo en Mieres. Da para varios programas del Club de la Comedia. Yo, como estoy de relax, disfruto y me relajo. Que no hay mejor balneario que el de casa. Que no hay mejor deporte que –como dice un personaje de La sonrisa etrusca y me recordó el otro día Luis María García- no hay nada como sentarse a la puerta de casa a ver pasar por delante el cadáver de tu enemigo.