Chilabas de Carolina Herrera
2008 / 07 / 09 - La Nueva España
Hace poco los del coro El León de Oro estuvieron en Tetuán. Me comentaron maravillas algunos miembros y me mandó un correo electrónico para corroborarlo Celso Roces, que está de profesor en el Instituto Español. Todavía no lo he visto este año por Lluanco. Si vais por Tetuán, preguntad por él. Conoce hasta el último rincón. Dar una vuelta por El Paseo con él y María José, su esposa, es como regresar al pasado.
Tetuán tiene la playa cerca, pero se parece más a Mieres. Al Mieres de las fotos de Alonso, que te recuerdan que fue una villa guapa y elegante. Como volver atrás en los libros de fotografías editados por el Museo Marítimo. Tetuán aún vive en aquel tiempo.
Cuando se habla de destrozos urbanísticos la prensa insiste en la costa. Los ejemplos, es cierto, cantan. Pero por el interior la realidad es igual de cruel. Un buen libro de fotografías podría ser el que recogiera los hermosos edificios que se tiraron y, de pie de foto, el nombre del concejal de urbanismo que lo autorizó y del alcalde que regía.
Como sigue lloviendo y nublado, cogemos el coche y nos plantamos en Madrid. Castilla está verde que da gusto verla. De noche concierto de Gloria Gaynor. A gritos la de “I will survive”. Un himno. Hay tantos asturianos en Madrid que uno se encuentra como en casa. Las “leyendas urbanas” son los últimos en llegar. Pero, los que lo hicieron antes también gritan con Gloria Gaynor “¡Sobreviviré!”.
Tampoco hace tanto calor en Madrid. Se sigue pudiendo dormir de noche. Por eso, quizás, siguen sin llegar los madrileños a Lluanco. Volvemos al coche y bajamos a Valencia. Se inaugura “Étnica”, el Festival de Músicas del Mediterráneo. 32 grados. No hay mucha gente. El mogollón se fue a ver a Police o bajó hasta Alicante a por Bob Dylan. Cuando ves estas programaciones de conciertos de verano te das cuenta que vives en el fin del mundo. O peor. En un ramal lateral del camino al fin del mundo.
Para poder mandar por email este artículo tomamos algo en la zona wifi del Once de Denia. Negros como zapatos de luto y cuerpo Danone, Sara Fernández, periodista de Vogue y su novio mierense. Hablamos de moda urbana. Del espectáculo cotidiano de las terrazas de la peatonal Fernández Cabeza, en Mieres. O del paseo entre la Iglesia y La Ribera, en Lluanco. Son nuestro Tetuán particular. Con chilabas de Carolina Herrera.