Zona 0
2010 / 01 / 26 - La Nueva España
Comenzaron las obras en la Zona 0. En la de Nueva York va a hacer algo Calatrava. Aquí, con lo que hizo en Uviéu ya tuvimos bastante. En la Zona 0 de Mieres van a ampliar la peatonal de Jerónimo Ibrán y empalmarla con Guillermo Schultz. El socavón es idéntico en Nueva York y en Mieres. El de Nueva York más triste. El de Mieres más sucio. En el de Nuevo York contratan a Calatrava para que tenga la luz del Mediterráneo. En el de Mieres pondrán las mismas baldosas grises y feas para seguir pareciéndose a sí mismo. Lo más positivo: los críos ampliarán su zona de fútbol de calle. Por mucho letrero de prohibido jugar. ¡Qué magnífica portería harán las cristaleras de la sala de exposiciones de la Caja!
Nos toca año de obras. Vayamos donde vayamos. Madrid sigue patas arriba. Inundaciones en los túneles de la M30. Hay que volver a levantar lo levantado. Santiago de Compostela patas abajo. Mejor llegar andando. Como se hizo siempre. Las circunvalaciones de la capital las diseñó el enemigo. Para volver a levantarlas y rediseñarlas. Valencia capital reordena las ramblas. El agua sigue anegando todo. Porque todo es una rambla. Les da lo mismo. El caso, en todos los casos, es volver a levantar lo levantado, volver a embaldosar lo embaldosado, volver a reordenar lo reordenado. Y, como ven, no estoy hablando de Mieres. Ni de Llangréu. Ni d’Uviéu. Ni de Xixón. Aunque a todos nos recuerde más de lo mismo.
Un año de obras y poco más. Como dentro de un año hay elecciones, habrá que dar la sensación de que se hace mucho. En Mieres no se necesita. Porque ya se hizo mucho. No es broma. Os parecerá poco mérito haberse cargado a la oposición. Y a los que echan de sus respectivos partidos tenerlos a disposición a manera de subcontrata. El coste de la operación es mínimo. Y no sale a la luz, aunque queda reflejado en el convenio colectivo. Cuatro duros para los compañeros del gremio. Una categoría de chiste. Otra de broma. En fin, el chocolate del loro. Y, el loro, subido al hombro del capitán, partiéndose de risa.
Salgo de la cochera. Sorteo unas vallas que guardan otras. Atravieso la Zona 0 camino de casa. Un complejo entramado de tablones y pasarelas me permite llegar. Recuerda el entramado de troncos de Pandora, el planeta de la película Avatar. Un montón de jubilados intenta mirar el fondo del socavón. Les recuerda sus tiempos de mina. Si siguen cavando seguro que encuentran el travesal de Barreo. Una buena solución para el tráfico. Desaparecer bajo un túnel. O para algún concejal. Desaparecer también. Para dejar de sentir la risa del loro. Que lo seguirá haciendo cuando acabe la legislatura. Y la del resto de la tripulación. Que tendremos para reírnos y contar chistes una montonera de años.