Ingenieros
2009 / 04 / 23 - La Nueva España
El otro día saltó la bomba con una foto de La Nueva España. Salían tres: el Rey, el presidente de HUNOSA y un técnico. ¡Dios mío, habrase visto tamaña ofensa! ¡Llamar técnico a todo un ingeniero de los jefes jefes de HUNOSA! ¡Cometer la desfachatez de poner el nombre del Rey y el del presidente de HUNOSA y al tercero de la foto tildarlo simplemente de técnico! ¡Cuándo todo el mundo sabe que, en orden jerárquico y por debajo de Dios, en primer lugar tendría que aparecer el nombre del ingeniero y después los del Rey y el del presidente de HUNOSA!
La Facultad de Ingeniería de Mieres se viene para Mieres. En Uviéu tienen una gana de quitársela de encima que no ven. Menudo solar que les queda en pleno centro. Imagínate. Al precio que está el metro cuadrado. En plena milla de oro. Haciendo esquina con Arquitecto Reguera, Independencia y Ventura Rodríguez. En el periódico da la sensación de que los de Uviéu ponen el grito en el cielo. Pero tienen unas ganas tremendas de quitarse el muerto de encima. Incluso el alcalde. Pero, como es, además de alcalde, ingeniero, hace como que protesta y se ofende. Cuando él estudiaba era una señora carrera y como tal tenía que estar en la capital. Ahora terminan cada año un puñadín. Tienen menos peso político que una asociación de ex concejales de ayuntamiento. Calcula: ni en las fotos de prensa los llaman ingenieros. Con técnicos van que arden.
Lo que cambiaron los tiempos. Con lo que significaba antes que una fía se te casara con un ingeniero. Valía más eso que el gordo de Navidad. Los doce apóstoles juntos eran unos nindundis al lado de todo un ingeniero. Lo de después de Dios la Casa de Quirós era una parida en el frontispicio del palacio de los Marqueses de Camposagrado, ahora Instituto Bernaldo de Quirós. En esta tierra todo el mundo sabía que después de Dios siempre estaban los ingenieros. Es más, todavía a día de hoy, un profesor el primer día de clase tiene el sagrado deber de recordar a los futuros ingenieros esa máxima. Ya sólo se la creen ellos.
En fin, tenemos el Campus solín. Perfecto para pedir, de una vez por todas, que se traslade aquí la sede del Gobierno. O nos declaramos autonomos Les Cuenques y ponemos en él nuestra propia sede. El edificio es perfecto: el último construido siguiendo el modelo arquitectónico soviético. Si Kosovo, que es más pequeño, lo consiguió, ¿por qué no nosotros? Ya sé yo por qué el Gobierno de España no reconoce Kosovo: tiennos miedo.